Conexión. Creo que esa es la palabra que define en esencia lo que viví en el proceso de creación de "Theta". Trabajar con Manu Ortega ha sido un regalo desde el minuto cero. Conectó con el proyecto, ambos estábamos en un periodo sensible hacia la ma/paternidad y creo que eso sumado a su profesionalidad hizo que todo fluyera a la perfección. Casi no hubo cambios, fue como si nuestras mentes viajaran en el mismo barco y a la misma velocidad ¡un lujo, vamos! Ahora en la distancia creo que ambos vibrábamos por aquel entonces en frecuencia "Theta". Un placer.

Cuando alguien es capaz de cambiar su turno de trabajo por ir a escucharte y verte actuar semana tras semana, uno se siente tan halagado que no sabe ni qué…